Desde hace muchos años y me remontó a mis primeros semestres de arquitectura en la pontificia universidad Javeriana, he estado esperando con ilusión la aparición de tecnologias de realidad aumentada que me permitieran construir edificios en la red y diseñar arquitecturas líquidas, más conocidas como esos espacios virtuales en los que creo que algún día habitara la conciencia del ser humano, una vez nos hayamos liberado del cuerpo biologico como interfaz para interactuar con el mundo (pero eso es harina de otro costal). La verdad es que veía la implementación de estas tecnologías en la industria del diseño como una realidad muy alejada de mi natal Colombia, que aunque querida, llena de fe y alegría, no se ha caracterizado por estar a la vanguardia del desarrollo tecnológico. Salvo por una excepción, y fue cuando visite las oficinas de Brash 3D en Bogotá, para reconocer que estaba cayendo en un error al creer que en colombia no existe la innovación.
Conocí a Luis Martinez un miércoles en la tarde, un innovador nato, sencillo y con una visión muy amplia del panorama global en temas de innovación. La visita a su oficina se dio gracias a Camilo Cruz, un viejo amigo de la infancia, quien me contó que junto a Luis y el equipo de investigación de Brash 3D, estaban desarrollando programas y aplicaciones para diferentes industrias a partir de tecnologías de realidad aumentada e imágenes en 3D.
En sí, Brash 3D, es una compañia que genera contenidos digitales en 2D y 3D permitiendole a las personas aproximarse e interactuar de forma sencilla y divertida con sus dispositivos digitales.
Me sorprendí cuando me enteré que Luis es el encargado de hacer que las salas de cine del país puedan proyectar peliculas en tres dimensiones, además de ser el responsable de hacer las gafas que se usan para ver los films y fue comisionado por el grupo de Chemical Brothers para generar los contenidos visuales en sus conciertos en Bogotá y Medellín. Incluso llegó a hacer producciones estereoscópicas para una de las empresas más famosas del planeta: La revista Playboy.
Después de un buen rato de conversaciones, él cuenta con tranquilidad como su compañia es la única en el territorio nacional, que se encarga de hacer estos proyectos realidad y como desde que regresó de Canadá, se ha convertido en embajador de la innovación, patrocinado por pro-export representando a Colombia en ferias de alta tecnología como la Expo-Shangai en China, una de las más competitivas y prestigiosas del mundo.
Como todos saben, una imagen vale más que mil palabras y no es lo mismo vivirlo a que alguien se los cuente. Por esta razón los invito a conocer el trabajo de Luis Martínez, el innovador del mes en infinitylab.