Pocas cosas se han escrito en Colombia sobre “el internet de las cosas”, un concepto tan revolucionario y fantástico que a simple vista nos parece lejano y mágico. Como alguna vez afirmo Arthur C. Clark, sobre los avances tecnológicos, diciendo que: -cualquier tecnología que sea suficientemente avanzada, no se diferencia de la magia. Frase que hoy en día se ha convertido en una consigna máxima de la ciencia ficción sobre el poder que tiene esta para generar asombro en los seres humanos, y es precisamente sobre el asombro, esa cualidad innata de maravillarnos por lo desconocido y de enamorarnos por las insondables posibilidades y potencial puro, que la tecnología y la creatividad juntas conllevan; sobre lo que trata esta columna.
Para contextualizarnos, imaginen que todos los objetos de uso diario, orgánicos ó inorgánicos, desde una manzana, un árbol, un edificio o un barco, pudieran estar conectados a internet por medio de tags y pudieran ser identificados por nuestros dispositivos electrónicos, o incluso en un futuro cercano, “ser en sí mismos digitales”, permitiéndonos crear y procesar altas cantidades de información sobre cada objeto con solo tocarlo. Como por ejemplo, al tomar una manzana, permitirnos saber la fecha de su cosecha, valor nutricional, lugar de procedencia, que variedad es, y por qué no, aprender recetas para cocinar y diferentes formas de comer una manzana. En otras palabras seria darle un verdadero bocado al árbol de la sabiduría, todo esto sin ser tan pretenciosos y temerosos como Eva y Adán, -aclaro. Estas son solo algunas de las posibilidades del “internet de las cosas” y como estas impactaran en nuestra vida para siempre.
Como esta nota trata sobre el asombro y sus infinitas posibilidades, puedo decir con orgullo, que hace unos días me entere que Samsung eligió a Bogotá, como el primer escenario de lanzamiento en Latinoamérica, para experimentar este concepto de la mano de su tecnología. El proyecto llamado GALAXY STUDIO en tu vida. Es algo tan insólito y audaz, que busca transformar la experiencia de los capitalinos, en algo tan simple como caminar por la ciudad, comprar ropa, hacerse un corte de pelo o decorar el interior de su casa o apartamento.
Este experimento y oda a la innovación tecnología y la vida, inicialmente abarcará la zona rosa de la ciudad contemplando algunas tiendas y lugares distintivos, permitiéndonos interactuar de forma distinta con todos estos escenarios, en este caso la tienda de vinos: GIGI’s, en donde a la hora de la cena, los amantes del buen vino podrán tomarle una foto a la etiqueta de botella que elijan y a través del GALAXY Gear, obtendrán una descripción exacta del licor que beberán. Para los que aún no lo conozcan el Gear de Samsung es un smartwatch que se conecta con tu celular, permitiéndote revisar correos, enviar mensajes y acceder a internet. Es esta pulsera, la maravilla que nos permitiría vivir esta iniciativa.
Les dejo un pequeño mapa que encontré en internet con algunos de los lugares de la T en la que podrán vivir esa experiencia.
¡Celebramos entonces la llegada del internet de las cosas! Y espero poder ampliar esta columna con información detallada y de primera mano, sobre este experimento de Samsung en la zona rosa.
Un feliz fin de semana para todos.