Sebastian Errazuriz presenta una serie de esculturas funcionales que replantean el propósito del mobiliario doméstico en su última exposición en la Galería Cristina Grajales en NY.
La muestra busca replantear el sentido de lo cotidiano invitando al espectador a desvanecer los límites entre el diseño industrial y el arte. El gabinete, fue construido a partir de 20.000 varas de madera otorgándole a su morfología una superficie agresiva y hostil, que juega con el principio de apertura, abriéndose y cerrándose estableciendo una relación diferente con el usuario y el contexto en el cual esta se inscribe. Sin duda, la posición de Errazuris a la hora de definir interacciones a través del diseño, se aproxima más a una relación entre organismos vivos, así este volumen de madera les parezca a muchos una pieza inerte.
Fuente: Designboom