Podría decirse que desde hace mucho tiempo los mono-ciclos han sido bautizados como vehículos menores de entretenimiento y popularizados por hippies y saltimbanquis de semáforo y zonas bohemias de las urbes modernas; y es precisamente este atractivo estético circense, el que ha cautivado e interesado a la prestigiosa marca de vehículos Audi para gestionar el prototipo de su más reciente proyecto.
Este vehículo de una sola rueda, un único guarda barros y un único ocupante, es propulsado por un motor eléctrico diseñado por el español Ángel Sánchez Vargas, en colaboración con el departamento de Búsqueda de Diseños de Audi en Munich, y es uno de los proyectos verdes más esperados y con mayores posibilidades a futuro de esta marca; Debido a su atractivo, facilidad de manejo y la rapidez, consolidándola prematuramente como una opción asequible para las personas que quieren independizarse del transporte público.