© Fotografía por Catalina Chauta.
Hablando principalmente del muralismo y del lugar donde se gestó, nos trasladamos a México, país que obtuvo una nueva manera de ver el arte, dejando de lado los bodegones, retratos y paisajes, para dejar espacio a los murales que abarcaban gran parte de edificios y construcciones públicas. El muralismo, para la sociedad, puede ser adoptado como una extensión del graffiti, pero no es así. Hay cosas en común entre los graffitis y los murales, por ejemplo que los autores de estos buscan «paredes» lienzos de cemento ubicados en lugares transitados y que para su comodidad, estén «cuadrados» en su léxico.
© Fotografía por Catalina Chauta.
Contando con diseños básicos de dibujo y proyecciones a las paredes, Juan David Díaz Umaña hizo que el muralismo se hiciera conocido en el municipio de Sopó; es un amante de los colores vibrantes y ha sentido desde muy pequeño la necesidad de expresar sus ideas por medio de un pincel.
¿Por qué muralismo y no grafitti?
Es chistoso, porque un grafiti o un mural no se distinguen por su técnica, sino como por la intención de lo que uno quiera expresar. A mi siempre me ha gustado más el muralismo, porque la ideología en que fue basado es un poco más trabajada, un poco más rica en técnica. Se trabaja mucho con vinilo y con el pincel.
© Fotografía por Catalina Chauta.
¿Cómo inicias pintando?
El primer dibujo que yo hice, era como un canario, el de chitos, Yupi. En ese tiempo uno pintaba lo que veía, ese tipo de cosas que de una u otra forma me imponían. Y la primera pintura que yo hice como tal al óleo, fue una réplica de La Jirafa Ardiente de Salvador Dalí.
¿Referentes de pintores que puedas nombrar?
Al principio me gustaba mucho el surrealismo, pintores como Salvador Dalí, Giorgio de Chirico, Max Ernts; me gustaba el tema de como incorporar los sueños en una pintura, como uno podía desenvolver varios contextos en una pintura; no había que utilizar la razón para pintar sino simplemente imaginarlo y ser muy muy creativo.
© Fotografía por Catalina Chauta.
¿Puedes definir tu estilo de alguna manera?
No, yo aún no tengo un estilo propio, uno mira pintores de aquí, de allá… y yo soy muy curioso y me gusta probar mucho de todo, pero hasta hace poco me ha venido gustando el tema del arte a partir del consumo de sustancias alucinógenas, además que es un tema como místico y me ha enriquecido mucho una que otra experiencia que he tenido. Así que ahora estoy tocando el tema de como se siente estar en otros estados de conciencia.
¿Qué puedes definir como puntos de inspiración?
La música y el cine, los pintores ya uno los pasa un poquito, uno ya no busca pintura; uno busca como sensaciones, impresiones. Es bueno saber la historia del arte y trabajar sobre lo que se ha hecho; pero uno quiere aportar cosas diferentes, ideas nuevas. Si yo no escuchara música yo no podría pintar, ella lo hace a uno sentir, activa las imágenes interiores. El cine y la música son mis mayores influencias.
© Fotografía por Catalina Chauta.
¿Qué proyección tienes a futuro?
Quiero adquirir mucha experiencia, ver muchas cosas, después ya uno empieza a pensar y a discernir. Lo que yo quiero es ser artista, pero no uno de esos que tienen un lugar y venden cuadros; quiero tener un rol en la sociedad, que pueda generar ideas de cambio y no sólo ahora si no que me tomen como referente y que hiciste realmente importante para el arte.
© Fotografía por Catalina Chauta.