En Australia comenzaron a implementar señales de tráfico de tinta electrónica, que informarán y en caso de necesitarlo se actualizarán para indicar una información necesaria, consumen hasta un 99 por ciento menos de energía, lo que permite un significativo ahorro, así que era sólo una cuestión de tiempo antes que las ciudades comiencen a utilizar esta tecnología para las señales.
Las nuevas señales inalámbricas están conectadas a Internet de las cosas y muestran el cambio de información vial, manteniendo informados a los conductores con las actualizaciones pertinentes. Funcionan con energía solar y por lo tanto el 100 por ciento auto-sostenibles y no susceptibles a problemas como cortes de energía.
Utilizan poca energía, ya que sólo se conectan a 3G en momentos pre-programados al iniciar o cuando reciben información nueva a través del software de Visionect. Son visibles a la luz del sol, la tinta electrónica utilizada es la misma que la utilizada en los lectores de libros electrónicos y relojes inteligentes, por lo que cuando se acerca la noche, las pantallas tendrán iluminación y no se necesitarán señales auxiliares.