Dwayne Coleman es un joven artista londinense, que con un estilo propio, marcado, con tendencia a lo psicodélico y a lo kitsch; busca resolver sus asuntos personales, etapas de su infancia y la cultura popular, que tanto influyeron en él, logrando exponer gran variedad de obras en los últimos años, que proponen y muestran, su visión.
Coleman tiene un trabajo particularmente interesante e innovador, llamado Skelebrities, una fusión de fotografía e ilustración digital, proyecto que desarrolló inicialmente para mostrar a algunos famosos que a su modo de ver, eran indignos de la atención del público, pero luego, tras una transformación ideológica, vemos que el trabajo actual de Dwayne, en el que él solo busca diversión, ilustra retratos de chicas atractivas, porque según él “estéticamente todo se ve mejor con mujeres desnudas, que aún conservan su originalidad”, pero lo que hace a esta muestra tan llamativa es su trabajo de ilustración digital, que sobrepone en retratos la estructura ósea humana, es decir su esqueleto, lo que lleva finalmente a una imagen que hace visible lo que generalmente a simple vista no se puede ver, algo de lo que todo ser humano está compuesto sin importar quién sea, un retrato que termina siendo realmente fiel al humano, desde lo más profundo de sí mismo.
Por: Tatiana Serna Castrillón